La palabra “reciclado” forma parte de nuestra vida desde hace unos años y ya estamos acostumbrados a utilizarla en nuestro día a día. En el mundo de los hilos hablamos normalmente de dos tipos de hilos reciclados: pre-consumer y post-consumer. Teniendo como principal diferencia el punto del ciclo de vida del producto al que es aprovisionado.
Entendemos como hilos reciclados pre-consumer aquellos que son fabricados utilizando como materia prima residuo textil que todavía no ha sido utilizada por el consumidor. La fuente de aprovisionamiento más habitual de esta materia es el recorte de trapo, residuo del proceso de confección textil.
Por otra parte, entendemos como hilo reciclado post-consumer aquel que utiliza como materia prima residuo textil que ya ha tenido un uso por parte del consumidor.
Teniendo clara esta diferencia, es notorio que los hilos reciclados post-consumer contribuyen más a la sostenibilidad de nuestro entorno. Actualmente la gran mayoría del residuo textil que genera nuestra sociedad termina en vertederos o quemado a incineradoras (aproximadamente el 90%). Las últimas cifras declaradas por “The Circular Lab by Ecoembes” a finales de 2021 hablan de que a nivel mundial se generan aproximadamente 92 millones de toneladas al año de residuo textil.
Vivimos en un mundo de recursos limitados y día a día tenemos más clara la necesidad de migrar nuestro modelo económico a un modelo nuevo. Un modelo que entienda y respete más y mejor nuestro entorno, un modelo de economía circular.
En S. Vilarrasa S.A vemos el hilo reciclado Post-consumer como pieza clave para hacer posible este cambio de modelo. Estamos plenamente convencidos de que es la materia prima del presente que nos ayudará a tener un futuro más sostenible.
